¡Hola amigos! Estamos a muy poquito de acabar el año, a tan sólo unas horas (depende de donde estés cuando me leas, igual ya estás a 1 de enero). Esta es mi última entrada en el blog del año 2017. Voy a empezar dándole las gracias a este 2017 que está a punto de acabar, gracias por las bellas experiencias, por las nuevas amistades, por las nuevas metas, por las nuevas enseñanzas, por los momentos en que he disfrutado tanto de la música como de los libros, del teatro (espero que el proyecto del próximo año me salga bien y que sean muchos más), de las fiestas, del arte, de las tradiciones, de mis pequeños viajes, de cada momento de cariño, por la evolución de este blog (me ha dado muchas alegrías, espero que siga creciendo, que a ustedes les guste lo que hago, y mantener un ritmo constante y no perder el entusiasmo con él, y que me dé sorpresas y satisfacciones), por el scrap (espero seguir aprendiendo más sobre ello), por el lettering (también espero seguir aprendiendo sobre eso). Gracias por los momentos con la familia.
Y al 2018 le pido más momentos buenos con mi familia, mucha salud para mantenernos unidos y que no falte nadie, buenas experiencias, que la familia de Aspercan siga creando proyectos que nos lleven unidos y al éxito como este año. Pido seguir aprendiendo, pido más teatro, más música, más bonitas palabras que leer, más libros para reseñar, más papelterapia (como dice Charuca jeje), más de todo lo que me hace feliz. Que este que es mi blog siga para adelante y que me llene de satisfacciones. Más comprensión por mi parte y por las demás, más paciencia, más tolerancia, más unidad, más alegrías, más fuerza para el mundo, menos de todo lo malo.
Ahora voy con un poco de cultura, no me digan que no es curioso saber de qué manera celebran en otros países este famoso día. Y es que la Nochevieja o Fin de Año se celebra en todo el mundo, pero no todos coincidimos ni en el tiempo, ni en la tradición del lugar.
Veamos...
Y al 2018 le pido más momentos buenos con mi familia, mucha salud para mantenernos unidos y que no falte nadie, buenas experiencias, que la familia de Aspercan siga creando proyectos que nos lleven unidos y al éxito como este año. Pido seguir aprendiendo, pido más teatro, más música, más bonitas palabras que leer, más libros para reseñar, más papelterapia (como dice Charuca jeje), más de todo lo que me hace feliz. Que este que es mi blog siga para adelante y que me llene de satisfacciones. Más comprensión por mi parte y por las demás, más paciencia, más tolerancia, más unidad, más alegrías, más fuerza para el mundo, menos de todo lo malo.
Ahora voy con un poco de cultura, no me digan que no es curioso saber de qué manera celebran en otros países este famoso día. Y es que la Nochevieja o Fin de Año se celebra en todo el mundo, pero no todos coincidimos ni en el tiempo, ni en la tradición del lugar.
Veamos...
¿Cómo se celebra el Fin de Año en cada país?
En Alemania...
La celebración del año nuevo se concentra sobre todo en la puerta de Brandenburgo (Berlín), en donde mucha gente se reúne para brindar con Sekt (que es un vino espumoso) o champán.
Otra de las costumbres curiosas que los alemanes tienen es arrojar plomo fundido en agua fría, entonces la forma que se va dibujando en el plomo al solidificarse se cree que predice lo que le ocurrirá a cada persona en el Año Nuevo. También es costumbre comer berlinesas, que son unas rosquillas rellenas de mermelada, como también unos pequeños cerditos de mazapán con los que dicen que se atrae la buena suerte.
En Brasil...
Y llegamos a un lugar, un país americano, en el que no hace frío precisamente, sino que el Año Nuevo se celebra seguramente al lado de la playa (al estilo canario jeje).
Su costumbre en vestirse de blanco, para mantener alejados a los espíritus malignos. Otra tradición brasileña para despedir el año es arrojar flores al mar (muy típico de ellos) y saltar sobre siete olas, una por cada día de la semana, (eso me suena más a la noche más larga del año, San Juan, por lo menos en lo que a mi tierra se refiere y a mis costumbres). Las flores que se utilizan son gladiolos blancos para pedir paz, rojos para el amor y amarillos para el dinero.
En Chile...
En este país de Sudamérica, se acostumbra a comer una cucharada de lentejas a medianoche y poner dinero en el fondo de los zapatos para tener prosperidad durante el año que comienza. Los que más se atreven pasan esa noche en los cementerios para acompañar a sus parientes fallecidos celebrando la fiesta junto a ellos.
En Dinamarca...
Los daneses tienen la costumbre de estallar platos y vasos contra las casas de sus amigos y vecinos para celebrar la llegada del Nuevo Año y despedir el viejo. Otra de sus costumbres es saltar desde lo alto de una silla justo a las doce de la noche.
En Ecuador...
Este es otro de los países en los que el clima es más bien cálido. Los ecuatorianos crean figuras de los políticos que queman a media noche, para empezar con buen pie el Año Nuevo. También es costumbre esconder dinero en distintos rincones de las casas para tener prosperidad durante todo el año.
En Escocia...
Los escoceses tienen la tradición de visitar a sus familiares y amigos a sus casas llevando regalos, como pan, whisky y un poco de carbón. En Edimburgo (su capital) a medianoche se dispara un cañón en el castillo, y a continuación se celebra un espectáculo de fuegos artificiales.
En Filipinas...
Los filipinos consideran que los objetos redondos traen prosperidad. Por eso en Nochevieja, la gente del lugar se viste con ropas de lunares y llevan monedas en sus bolsillos, y comen frutos redondos como los pomelos o las naranjas.
En Grecia...
Los niños griegos pasan este día cantando villancicos de Año Nuevo, mientras que los mayores les dan dinero. Después se celebra una comida tradicional. Por la tarde, se cocina un pastel llamado vassilopita, en el que hay una moneda envuelta en papel de aluminio escondida en el interior. A la medianoche, las familias apagan las luces y abren los ojos en la oscuridad "para entrar en el Año Nuevo con una nueva luz". Después hay espectáculos de fuegos artificiales y se come el vassilopita, a la persona que le toca la moneda escondida se le considera afortunada. Y el día 1 de enero se celebra la fiesta de San Basilio, en la que se acostumbra a intercambiar regalos.
En Holanda...
Los holandeses tienen una costumbre muy peligrosa que es hacer explotar lecheras en la noche del fin de año. Como esta tradición conlleva muchos riesgos, se ha terminado por prohibir en muchas ciudades. Otra tradición holandesa es bañarse en las frías aguas del mar del Norte.
En Japón...
Los japoneses llaman a la fiesta para dar la bienvenida al nuevo año Shogatsu, y es una de las fiestas más importantes de Japón durante todo el año. Las casas se adornan con decoraciones de bambú, ramas de pino y tiras de papel blanco. En Nochevieja, antes de la medianoche, la televisión retrasmite la ceremonia de los templos, en la que golpean un enorme gong 108 veces para limpiar y borrar los 108 errores del año que termina. Al día siguiente, Año Nuevo, después de desayunar, la gente se viste con kimonos tradicionales y va al templo a rezar para pedir buena suerte. En los templos se pueden comprar los daruma, que son unos muñecos sin brazos ni piernas pero con barba, que son huecos y se conocen como muñecos de los deseos. Aunque sus ojos son sólo de color blanco, uno de los ojos se tiene que pintar de color negro con un rotulador cuando se hace un propósito para el nuevo año. Si ese propósito se cumple a lo largo del año, se colorea también el otro ojo.
En Italia...
Los italianos tenían la costumbre de tirar muebles viejos por la ventana, pero esa costumbre actualmente se está perdiendo. Cuando suenan las doce, en Italia comen una cucharada de lentejas por cada campanada. Se supone que esto trae prosperidad, ya que las lentejas para ellos representan monedas. También se celebran espectáculos de fuegos artificiales por todo el país.
En Rusia...
Los rusos tienen dos celebraciones para el fin de año: el "viejo año nuevo" que se celebra el 14 de enero, como marca el calendario ortodoxo tradicional, y el "Nuevo Año Nuevo" que se celebra la noche del 31 de diciembre. En la celebración del "Nuevo Año Nuevo" la gente sigue la retrasmisión de las campanadas a medianoche desde el reloj de Kremlin, en Moscú. La gente utiliza los doce últimos segundos del año en formular en silencio sus deseos para el año que empieza. Y Ded Moroz (que así llaman al abuelo frío o abuelo de las nieves, en español) y su nieta Snegurochka (la doncella de la nieve) son los que se encargan en Rusia de repartir los regalos a los niños.
Fuente: información extraída del blog Anaya Infantil y Juvenil. A su vez, se han informado con el libro Manual de la Navidad para toda la familia (Ana Alonso, ilustrado por Ximena Maier).
Y en España...
En España celebramos el año nuevo con fiestas y retrasmisiones alrededor de las campanadas por todo el país, con cada una de las campanadas la gente toma doce uvas (después de los famosos cuartos, no te vayas a confundir). Una de las más famosas y más seguidas en la península es la de La Puerta del Sol (en Madrid) en la que muchos se reúnen para partir el año junto a sus amigos y su familia. Lo celebramos con mucha música, mucha fiesta y muchos fuegos artificiales (cosa que no me gusta mucho, la verdad, lo de los fuegos digo). Antes de que llegue la noche, también son tradicionales las carreras de San Silvestre, en la que la gente se reúne para compartir un rato corriendo en compañía de sus amigos en el último día del año, y muchos corredores se visten con ropas y objetos tradicionales de Navidad. Solemos partir el año con nuestras familias, y después la gente se suele ir de fiesta hasta altas horas de la madrugada y de la mañana. Los más rezagados siempre paran por una churreria a desayunar otro año más los tradicionales churros con chocolate, que siempre vienen bien después de una buena noche de fiesta y antes de irse a dormir.
Mientras escribía esta entrada en mi blog, estaba viendo por la tele la tradicional carrera de San Silvestre que se celebra en mi ciudad, San Cristóbal de La Laguna (Tenerife), una de las tantas que se pueden ver en todo el país. Como particularidad, tengo que decir que en Canarias, como por los husos horarios tenemos una hora menos que en la Península, es como si celebráramos el fin de año dos veces. Por lo menos yo, veo una hora antes como parten el año en Madrid y después nos tomamos los canarios las uvas una hora después.
Y... ¿De dónde viene la tradición de comernos doce uvas en Nochevieja?
Pues hay que decir que esta tradición es bastante antigua, pues se remonta al siglo XIX, cuando los burgueses tenían la costumbre de uvas y brindar con champán para despedir el año. Pero en realidad las "doce uvas de la suerte" (que es como las llamamos los españoles) comenzaron a tomarse de manera masiva en la Nochevieja del año 1909, ya que hubo un excedente de cosecha de uvas en Alicante. Tradicionalmente, todos los años por Nochevieja, ponemos 12 uvas por cada comensal que simbolizan los doce meses del año y que deben comerse con cada una de las doce campanadas que da el reloj a las doce en punto de la noche.
En muchas de las plazas de ciudades españolas es donde se traslada la fiesta de Nochevieja, se convierte en el lugar de reunión para compartir el momento tan esperado de las campanadas, porque aunque lo podamos vivir perfectamente por la televisión, pocas cosas son comparables a vivirlo directamente sumergiéndose en la fiesta.
Algunos lugares populares son: la plaza del Obradoiro (Galicia) en el que miles de gallegos están pendientes para partir el año; la Avenida María Cristina (Barcelona)...
Bueno y esto es todo... mis mejores deseos para el año que viene!! ¡¡Que tengan un muy feliz año nuevo 2018!!
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